EL CUERPO PROYECTIL

Relacion cuerpo / agua

¿Qué es un proyectil?

¿Por qué hablar de un cuerpo proyectil en natación?

Según el diccionario, un proyectil es un “cuerpo al que, por cualquier medio, se comunica una velocidad en una dirección determinada”. Por lo tanto, el proyectil tiene una fuerza que le da una dirección precisa, una distancia y también una duración que se puede llamar “fuerza de proyección”. Pero esta fuerza está constantemente contrarrestada por otras fuerzas que ralentizan su movimiento (en la tierra será aire, viento … y en el agua será la resistencia del fluido).

En balística (la ciencia que estudia el movimiento de los proyectiles), el objetivo es que el proyectil vaya más lejos, más rápido y use la menor energía posible. Y para eso estudiamos sobre todo cómo reducir la resistencia ejercitada por su ámbito (el aire, el agua). El proyectil debe tomar una forma muy particular que reducirá esta resistencia al máximo. Esta forma debe ser indeformable. También hablamos de aerodinámica o, para la natación, de hidrodinámica.

Hablamos de un cuerpo de proyectil en natación porque el cuerpo del nadador debe adoptar una postura hidrodinámica para que la fuerza de proyección de su cuerpo sea máxima. Es decir, que le permite nadar más lejos, más rápido y con un mínimo de energía. Es importante entender que la postura está al servicio del desplazamiento.

Las leyes de la Física nos enseñan que un cuerpo en movimiento debe luchar contra fuerzas contrarias (fuerzas de resistencia) a su movimiento (gravedad, el aire, el fluido…) para avanzar. Y esa resistencia aumenta si aumenta su velocidad.

En el agua, la fuerza de resistencia aumenta exponencialmente, más precisamente en proporción al cuadrado de la velocidad del cuerpo. Por ejemplo, si el cuerpo se mueve a una velocidad de 2 m/s, se frenará cuatro veces más que a 1 m/s. El objetivo es reducir esta resistencia tanto como sea posible mediante la adopción de una forma horizontal para que el eje principal de su cuerpo (cabeza, hombro, pecho, espalda) coincida con el de su movimiento.

La postura ideal es la horizontalidad más recta e indeformable posible. Brazos estirados hacia adelante, piernas estiradas hacia atrás, cabeza inclinada hacia el fondo debajo de los brazos y todo el cuerpo como roca. Además, esta horizontalidad permite ahorrar mucha energía.

Desde un punto de vista psicológico, la mayor dificultad es aceptar que el cuerpo toma una dirección diferente a la de la mirada. Lo que era arriba vuelve ser delante, lo que era delante vuelve ser abajo, lo que era abajo vuelve ser detras. Esa dificultad se supera fácilmente con el aprendizaje del cuerpo flotante.

El cuerpo proyectil es, por lo tanto, la capacidad de atravesar el agua con un frenado mínimo. El cuerpo flotante es un requisito previo del cuerpo del proyectil. Aquí medimos otros límites, que son los de las capacidades del nadador vinculadas a las acciones tomadas: las acciones del cuerpo en el agua. El nadador va a buscar la contracción la más completa de su cuerpo, un endurecimiento, para deformar el agua y no dejarse deformar por ella. Para nadar siempre más lejos, más rápido y durante el mayor tiempo posible.